Que tu propósito sea siempre alcanzar tu máximo potencial. Busca mejorar las áreas que necesitas trabajar; tus debilidades. Celebra tus grandes logros y los pequeños. Que siempre encuentres razones para seguir caminando. Que encuentres evolución en tu andar. Nunca pares de educarte y de cuidarte. Recordando siempre que es tan importante nutrir tu cuerpo, como tu intelecto y tu espíritu.
Que entiendas que escuchar es importante. Escuchar a los que te rodean pero más importante es escucharte a ti. A lo que desea tu corazón. Que la mejor manera de conocer, tanto a los demás como a ti misma, es precisamente esa: ESCUCHANDO. Así que no dudes en apartarte del ruido siempre que lo necesites, para poder escuchar fuerte y clara tu voz.
Que tengas presente que nunca es tarde para comenzar nuevos proyectos; nuevos sueños. Hoy es el día que más joven serás del resto de tu existencia. “Ayer” ya no es una posibilidad. “Mañana” no sabemos lo que nos espera. Ahí está la importancia de VIVIR hoy; de comenzar hoy; de soñar hoy.
Tú debes ser siempre tu prioridad. Si tú estás bien, los que dependen de ti lo estarán. Tú eres la única responsable de verte y sentirte bien. La única que cargará con las consecuencias de no trabajar por ello. Por lo tanto, escoge siempre ponerte en el top de tu vida. Es ahí el lugar que te corresponde.
Valórate siempre, incluso si sientes que nadie más lo hace. Invierte siempre en ti. En aprender; en mejorar; en sonreír. Nunca olvides esto: TÚ ERES TU MAYOR PROYECTO.
