Está claro que para crecer como ser humano tenemos que estar en constante evolución. Conectar con personas que vibren alto; personas “mágicas”, es una de las maneras más sencillas de lograr mejorar nuestra frecuencia. Muchas veces nos sentimos agotados, sin ánimo y con nuestros sueños moribundos, sin entender la razón. En esos momentos es importante hacer un alto y comenzar un “inventario” de aquellas personas con las que usualmente compartimos la mayor parte de nuestro tiempo. ¿Son personas generosas a la hora de decir cosas bonitas? ¿Personas exitosas? ¿Personas con deseos de crecer y superarse? O por el contrario, ¿son personas que siempre se están quejando? ¿Inconformes con su vida, pero no hacen nada para cambiar?
No digo que sean estas personas 100% responsables de la manera en que nos sentimos. De hecho, es importante que nosotros tambien trabajemos para ser esa energía positiva que alumbre los días de alguien más. Pero definitivamente no podemos permitir que la amargura y los pocos deseos de los demás apaguen nuestra luz. Tenemos que asegurarnos que esta sea tan fuerte que sea capaz de sobrevivir a las inevitables ocasiones en que nos tocará escuchar y vivir cosas negativas.
Te propongo rodearte de personas positivas. Personas que sonrían mucho. Que estén llenas de sueños y estén trabajando por ellos. Personas capaces de decirte: “lo estás haciendo bien”; “que bonita estás”. Que se alegren de tus logros. No hablo de personas que lo digan solo por quedar bien. Tampoco de personas que necesiten validación constante. No se trata de eso. Se necesita gente genuina. Gente que cuándo digan algo lo hagan con total sinceridad. Que sea recíproco y deje una sensación de bienestar en tu corazón.
Te aseguro que son esas las personas que te harán ser mejor. Te harán soñar con cosas increíbles y con sus palabras te darán el empujón que necesitas para lograrlo. Te harán fijarte metas más altas y trabajar por ellas. Te amarás más, ya que vivirás rodeada de amor; de gratitud; de vibras buenas. Asegúrate de construir un círculo de poder y de ser tu también parte de la buena energía que lo rodea.