Se que lo que vivo hoy, en un futuro se verá como viejas fotografías. Que el presente, será el pasado muy lejano, algún día. Que los besos que hoy planto en las mejillas blandas de mi hijo, no serán iguales para siempre.
Hoy mi vida es joven y llena de sueños. Pero no quiero despertar un día, para darme cuenta que el tiempo pasó, y con el se llevó lo que siempre pensé que sería mío. El futuro ya no se verá tan claro. Por eso quiero asegurarme hoy, vivir de manera tal, que cuando el reloj esté por detenerse, no sea hora de arrepentimientos.
Las imágenes que hoy vemos en blanco y negro, fueron vidas llenas de color. Minutos que se fueron convirtiendo en años. Que se sienten casi como otra vida, para quien la vivió. Piernas firmes que corrían por el patio; brazos fuertes que abrazaban con amor.
Y es que estamos aquí de paso. Nadie, hasta ahora, ha logrado permanecer intacto. Somos en el mundo, un suspiro más. No quiero que el paso del tiempo sea cruel conmigo. Quiero saborear cada paso del camino. Construir un pasado, que en el futuro, me de placer mirar.
Hoy soy yo, y mañana seguiré siendo yo, pero con la piel distinta. Hoy soy esa que juega en el piso; que ríe; que canta…pero, ¿y mañana? ¿Me verán con los mismos ojos? ¿Me escucharán con las mismas ganas? Solo espero que el paso del tiempo sea generoso, una vez más.
Hoy, agradecida, decido vivir la vida que amo. Hoy, no dejo que el presente se me escape de las manos. Vivo, consciente, prestando atención a lo que tengo frente a mis ojos. Siendo la protagonista de mi propia historia. Haciendo que valga la pena, cada respiración.
Un día despertaré, y ya será mañana. Deseo en ese momento, poder recordar con amor todo lo hermoso que he vivido. Saber que la vida es buena conmigo. Que he reído; que he llorado; que sigo soñando. Saber que todo lo que me ha ofrecido, lo he disfrutado. Que seré yo, la misma…y hasta un poco mejor…