Muchas veces buscamos apoyo en personas a nuestros alrededor, incluso para tomar desiciones de vida muy importantes. La verdad es que siempre es lindo saber que tienes personas con las que puedes contar para escucharte, darte palabras de aliento, o hasta una mano o un “regañito” si lo necesitas. Eso está muy bien, pero por un momento vamos a detenernos a pensar. ¿Realmente esta persona tiene la capacidad para esto que le estoy consultando? 

Al buscar apoyo o validación de otra persona es importante que seamos sumamente selectivos. Esto se debe a que las personas van a tomar en cuenta lo que les dices de acuerdo a sus creencias o sus experiencias personales. Por ejemplo, puede que estés entusiasmada con un proyecto de emprendimiento que quieres llevar a cabo, pero si buscas apoyo en alguien que piensa que lo mejor es tener la “seguridad” que te brinda un empleo tradicional, pues ya sabes lo que va a pasar. Puede que trate de convencerte que no lo hagas; que te hable de todo lo negativo que puede pasar…Al final, puede que si tus deseos no son lo suficientemente fuertes, te contagies con su negatividad  y no hagas nada. Aún sin malas intenciones, puede que le estés dando a las personas el poder de destruir tus sueños. 

Lo mismo sucede en las relaciones. Mucha gente suele pedir consejos a aquellos que están dispuestos a dárselo. Esto sin detenerse a pensar si esa persona realmente debería ser un modelo a seguir en el área de las relaciones saludables.

 ¡Óyeme! No digo que no los escuches. A veces de quien menos esperamos llegan las palabras que necesitamos en ese momento. Solo te digo que antes de dejar que las voces de otros sean las que dicten tu camino, mejor confíes en tu instinto. Que si las cosas salen mal, que salgan mal haciendo lo que tu decidiste. Lo que tu corazón y tu mente te dijeron que era lo mejor. Es así como poco a poco vamos aprendiendo de nuestros errores. Así la próxima vez podemos tomar decisiones desde la experiencia sin pretender que alguien más las tome por nosotros. Definitivamente si soy yo quien va a vivir con las consecuencias de mis acciones, debo ser yo quién tome mis decisiones. Tener un buen mentor; un modelo a seguir; gente que nos inspire es maravilloso. Solo asegúrate que merezca que lo tengas en ese lugar 😉  Pero, ¿sabes que es más maravilloso aún? Confiar en tus capacidades. Bueno, en resumen, quédate con la siguiente frase: “No escuches críticas constructivas de quien no ha construido”. La leí en algún lugar y me parece que puede salvarnos de muchas desilusiones.

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